Ir al contenido

¿Se viene el desdoblamiento cambiario?

  • Home

Las elecciones ya pasaron y las medidas económicas que se esperaban para frenar la fuga de capitales aún no se anunciaron.

Los rumores son muchos, desde un aumento en el impuesto a las tarjetas de crédito (del 20 al 40%) hasta un cupo de 500 dólares por mes para gastar con los plásticos, similar a lo instrumentado en su momento por el gobierno Venezolano.

También se habló de la implementación de un dólar turista, en lo que sería lisa y llanamente un desdoblamiento cambiario de facto.

Ahora bien, ¿de qué hablamos cuando nos referimos a desdoblamiento cambiario?

Puntualmente, nos estamos refiriendo a una medida que obligaría al público a manejarse en un esquema de cambios diferenciados o múltiples (por lo menos dos visibles y varios más secundarios) de manera legal, con la particularidad de que lo que cabe denominar “tipo de cambio nominal” también registraría, en sí mismo, una dualidad de valor.

Los desdoblamientos cambiarios: ¿funcionaron en la historia económica reciente?

En 1985, bajo la presidencia de Raúl Alfonsín, se lanzó el plan Austral, con medidas como el congelamiento de precios (cualquier similitud con la actualidad no es pura coincidencia) y un dólar alto que protegía el mercado interno y fomentaba exportaciones. Si bien en un principio la medida fue bien recibida en la city, al liberarse luego la discusión salarial llegaron aumentos de 30% liderados por la entonces influyente UOM (Unión Obrera Metalúrgica), que pusieron en jaque al modelo. Al poco tiempo, los controles de precios dejaron de ser efectivos y estos le ganaron la carrera a los salarios.

Muy cerca del default, con u$s 2000 millones de reservas y déficit fiscal y comercial, llegó el ajuste del plan Primavera.

Es justo reconocer ciertas diferencias de peso: el dólar todavía tiene cierto colchón, el Banco Central acumula u$s 34.000 millones de reservas y la producción, si bien se ha desacelerado, no se encuentra actualmente en una situación de crisis terminal ni mucho menos.

Pero por más datos “duros” que se pongan sobre la mesa, es difícil no reconocer que la iniciativa incluye un mix de lo peor del plan Austral, el plan Primavera y la convertibilidad. En definitiva, son ideas “ochentosas” inaplicables en un mundo que no se parece nada al de aquel entonces.

En los experimentos fallidos aplicados bajo el gobierno radical de los 80, operando el doble mercado, se decidió que las importaciones se liquidasen al mercado libre, que fluctuaba en función de la oferta y demanda. En una instancia de fuga de capitales (que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner busca evitar a cualquier costo), el valor del dólar libre, mayor al inicio en un 20% con relación al otro mercado (el comercial) marcaba una parcial “penalización” de esa fuga (hoy en día, esa penalización supera el 65%, correspondiente a la brecha entre el dólar oficial y el paralelo).

A su vez, los exportadores liquidaban en principio sus divisas por el mercado comercial oficial: las exportaciones primarias en su totalidad y sobre la base de promedios de ambos valores del dólar las exportaciones industriales. Como coronario, el Banco Central intervenía en el mercado libre, vendiendo parte de las divisas provenientes del mercado comercial, alzándose con una ganancia cuasifiscal.

Son ideas ochentosas inaplicables en un mundo que no se parece nada al de aquel entonces

También surgieron retenciones móviles de hecho, dependiendo del diferencial existente entre los dos mercados.

Conclusión.

Todo este andamiaje ya está, en mayor o menor medida, funcionando entre nosotros a partir de la instrumentación del cepo cambiario y la aparición de múltiples tipos de cambio.

Parece difícil creer que el gobierno no siga avanzando en esa línea reforzando los controles y medidas que apunten a dejar de perder reservas, que han bajado de 47.274 millones de dólares en noviembre de 2011 a 33.321 en el presente (-30%).

Las posibilidades de que el desdoblamiento cambiario (reconocido o no) se profundice aumenta con el correr de los días y las expectativas de los agentes económicos parecen ir en esa línea: los paquetes turísticos al exterior (que se abonan a un dólar subsidiado de 7 pesos versus los 9.80 del mercado informal o paralelo) sufren una demandan histórica, al igual que los coches de alta gama y los otros pocos productos en similares condiciones.

Parece difícil con estos datos sobre la mesa pensar que el anuncio de nuevas medidas pueda demorarse mucho tiempo más.


¿Quiere que el dinero se transforme en una fuente de satisfacción en vez de una fuente de preocupación en su vida?

Aprenda a salir de deudas, generar ingresos pasivos en su economía doméstica e invertir con éxito en la Bolsa de la mano de Nicolás Litvinoff en los cursos online de Estudinero! ¡Reserve su vacante!
Descuento activo: -20% off*

¡Anótese ahora y comience de inmediato!
Ingrese al siguiente link con su tarjeta de crédito a mano para completar la inscripción:


Finanzas PersonalesbolsaWarren BuffettBitcoin y Criptoactivos


Por dudas y consultas, escribir a cursos@estudinero.org

“Le enseñamos a generar sus propios VAIs (Vehículos Automatizados de Ingresos).”