Muchas cosas han pasado desde aquella nota que escribí para La Nación en Abril de este año titulada “Bitcoins: ¿protección virtual contra la inflación?, que supo tener una importante difusión en los medios.
Por aquel entonces, el valor de 1 bitcoin era de 108 dólares, tal cuál aparece en la nota. Recordemos que en Enero de este año, el mismo se encontraba en 20 dólares, con lo cuál había más que quintuplicado su cotización en 5 meses.
Invitado a participar en una nota del programa periodístico CQC en donde debía elegir una opción de inversión o, mejor dicho, de especulación de corto plazo (solamente un mes de plazo), me incliné por los bitcoins, ya que evalué que la alta volatilidad que presentaba podía ser un plus para el corto plazo. Pueden ver el segmento completo del programa aquí .
La “inversión” fue hecha en niveles de 120 dólares, que era lo que valía en ese momento. Un mes después, el valor era inferior a los 100 dólares, y de los 5000 pesos invertidos, quedaban algo más de 3.5000.
Pero esa es solo una “foto” de la película: El bitcoin bajó desde los 120 dólares hasta casi los 60 a posteriori, para luego rebotar fenomenalmente y recuperarse hasta los casi 140 dólares que vale en estos momentos. Con esto, la inversión de 5000 pesos ahora debería estar cerca de los 6000, con casi un 15% de ganancia. Si, en cambio, la competencia hubiese sido realizada un mes después, los bitcoins se hubiesen comprado a 70 dólares y la rentabilidad sería de casi el 100%.
Diversas noticas justifican esta firmeza que muestra la moneda virtual en estos momentos, entre las cuales se destaca la potencial salida de un ETF al mercado americano que replique su cotización, elaborado por los hermanos Winklevoss (fundadores de Facebook junto con Mark Zuckerberg).
¿Qué es lo que puede pasar de aquí en más?
En los cursos de Estudinero!, solemos intercambiar información sobre Bitcoins, con el objetivo de determinar si estamos ante un negocio prometedor pero desastroso como lo fueron por ejemplo los paneles de energía solar hace 2 décadas o, en cambio, nos encontramos ante una posibilidad de inversión ganadora como lo fue Interenet en sus comienzos.
Lo hacemos amparados en la privacidad que nos da el campus virtual de Estudinero!, y solemos analizar esta y otras inversiones que vemos con potencial, siempre asumiendo que es responsabilidad de cada uno el destino que le dará luego a sus ahorros.
Pero aquellos para los cuales la nota de La Nación que abre este post haya actuado como “disparador” para invertir un porcentaje de sus ahorros (se recomienda un monto no mayor al 5% del total), las ganancias son de casi el 30% en dólares, nada mal para los apenas 5 meses que han transcurrido desde entonces. Aquellos que hayan comprado, en cambio, luego de ver la nota de CQC, han prácticamente duplicado su capital en menos tiempo, solo 3 meses.
Veremos como sigue de aquí en más, cuando las perspectivas para el largo plazo parecen atractivas para aquellos inversores de baja aversión al riesgo (o, como decimos en los foros de nuestros cursos, para aquellos inversores que les gusta manejar “con el viento en la cara”).
Hasta pronto!
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